Después de las vacaciones de verano solemos recibir mensajes vuestros contándonos que vuestra piel ha cambiado (la notáis con menos luminosidad, mas áspera y ha aparecido algún granito) y nos preguntáis que podéis hacer para recuperar el equilibrio de nuevo. Hoy me gustaría compartiros algunos consejos generales que pueden ayudaros.
El verano es la estación en la que más nos exponemos al sol y al calor. Esto produce una mayor generación de radicales libres y un aumento de la sudoración, que se traduce en una pérdida de agua en la piel. Además, utilizamos más protector solar del habitual (que es importante para protegernos de las quemaduras) y si no hemos realizado una correcta limpieza, nuestra piel puede estar congestionada.
Reequilibra tu piel después de las vacaciones
Paso 1 - Exfolia
Utilizaremos la hidratante ligera Sunshine para enriquecer nuestra piel con antioxidantes y el limpiador y mascarilla Rainforest to para realizar un peeling enzimático que, además de regenerar nuestra piel, le aportará vitaminas y enzimas.
Aplica Sunshine sobre la piel limpia y seca, seguida de Rainforest. Masajea sobre la piel húmeda con las yemas de los dedos, idealmente mientras estás en la ducha, para permitir que el calor y el vapor calmen la piel.
Concentra el masaje en las zonas apagadas, secas o descamadas para eliminar el exceso de células muertas. Deja actuar unos minutos y, a continuación, sumérgete en el agua para eliminar fácilmente los productos y dejar paso a una piel suave y resplandeciente.
Paso 2 - Nutre
La hidratante ligera Moonlight aportará calma y nutrición a tu piel gracias al tanaceto azul, la caléndula, el aceite de argán y las mantecas de karité y cacao.
Este momento es tuyo. Nutre y masajea tu piel con Moonlight. Empieza por el cuello y el escote y continúa realizándote pequeños masajes circulares en tu rostro. Insiste en la zona del contorno de ojos.
Paso 3 - Bebe un litro de agua al día
Recupera la pérdida de agua en tu piel hidratándote desde dentro. Puedes preparar aguas saborizadas con un chorrito de zumo de limón, menta o romero.
Paso 4 - Descansa
Dormir bien es fundamental para que se realice el proceso de regeneración celular nocturno de forma óptima. Con un buen descanso notaremos nuestra piel mucho más despejada e iluminada.
Con cariño,
Annie